El concepto de Ciclo vital es intrínsicamente normativista. ¿Hay algún modo de referirse a él o definirlo sin recurrir a estereotipos?
No es una cuestión de lo políticamente correcto, sino que conlleva repercusiones pragmáticas a la hora de definir las dificultades vitales en base a un esquema poco inclusivo con gran parte de la sociedad.
El ciclo vital en la cultura
En este curioso spot han representado la vida de una mujer en Japón, cuya esperanza de vida es de 72 años. El motivo por el que se ha hecho viral es porque se rodó con 72 actrices distintas, que protagonizan, en cada uno de los segundos del comercial, un año de vida de esta fémina de rojo.
Más allá de la curiosidad del anuncio, por el modo en que fue producido, nos estimula, como profesionales, a plantearnos cuestiones que son ya clásicas y, sin embargo, quedan por resolver.
El ciclo vital y, más aún, el ciclo vital familiar, son conceptos con los que estamos muy familiarizados y podemos encontrarlos en cualquier manual básico de Invetervención Familiar, como este del libro "Enfoques en Terapia Familiar Sistémica" de Inmaculada Ochoa de Alda, en el que por cierto hay espacio para el divorcio, cosa impensable hace unas cuantas décadas.
⇒ Ver anexo: Ciclo evolutivo normativo
Es evidente que existe una norma, una tendencia cultural a funcionar de una determinada manera, pero en una sociedad cada vez más inclusiva, en la que distintos colectivos alzan la voz y visibilizan otras formas de hacer y experientar ¿Tiene sentido mantener ese imaginario de vida ordenada y predecible? ¿De qué modo ayuda al individuo saber que la sociedad sigue esas pautas? y más aún ¿A los profesionales?
Esta es sin duda una cuestión que nos inquieta y queremos seguir profundizando en ella. Si compartes esta inquietud y tienes alguna idea de cómo abordarla o reflexión disruptiva al respecto, contáctanos y seguimos hablando de cara a futuras publicaciones.